Cárteles mexicanos aceptan pacto de madres buscadoras
Al parecer los tres cárteles más poderosos de México: el de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo han visto de manera positiva el llamado de paz que lanzó el pasado 28 de mayo el colectivo 10 de Marzo, dedicado a la búsqueda de personas desaparecidas en Tamaulipas.
De acuerdo con la líder y fundadora de dicha agrupación, María Icela Valdez Chaidez, si bien los líderes del crimen organizado no han emitido algún video o comunicado al respecto, sí han realizado buenas acciones en los días posteriores a que se realizara el llamado.
“Gracias a dios que el crimen organizado ha comprendido y han estado apareciendo muchas personas, como esas 60 bolsas con restos que aparecieron allá en Jalisco en una barranca y esos 3 niños vivos que nos entregaron en Reynosa. A Yesenia (del colectivo Madres Buscadoras de Sonora) la entregaron también con vida”, detalló.
La señora Mary, como la conocen en los colectivos, asegura saber la desesperación y angustia que sufren quienes tienen familiares desaparecidos, pues ella inició con sus labores de búsqueda ante la insuficiente actuación de las autoridades desde que desapareció su hijo, el 10 de marzo de 2014, por lo que a finales de mayo decidieron lanzar esta “súplica” al narcotráfico.
“Es un llamado, es una súplica que nosotros le hacemos al crimen organizado, que por favor ya no desaparezcan a las personas que nos cuesta mucho trabajo encontrarlas y también nos cuesta mucho trabajo para que el gobierno los quiera identificar”, recalcó.
Por su parte, Delia Quiroa, vocera del colectivo 10 de Marzo, aseveró que además de los mensajes que han recibido entre líneas, el crimen sí ha comunicado directamente su posición sobre el acuerdo de paz pues por ejemplo en Michoacán, entidad donde opera el Cártel Jalisco Nueva Generación, un sacerdote les comunicó que estaban de acuerdo con el llamado, excepto con el punto 3 que versa sobre los enfrentamientos entre grupos criminales.
Además, indicó que en Tamaulipas el 3 de junio se reportó la desaparición de tres menores de edad, los cuales consignó en sus redes sociales pidiendo ayuda al Cártel del Golfo, que opera en Reynosa, y cinco horas después los niños aparecieron. Incluso afirmó que el más grande de ellos regresó con el mensaje de que ya no se meterían con los jóvenes.
Aunado a ello, señaló que un abogado que representa a uno de los grupos criminales de Sonora mencionados en el llamado, la contactó para mostrar el interés de la sociedad criminal.
“El sacerdote de Michoacán nos dijo que había hablado con un grupo y que le decían que estaba bien el pacto, pero el punto tres no, que es el cese de los conflictos. Luego me habló un presunto policía de Matamoros, que tiene relación con alguno de ellos y me dijo que él había escuchado que no era tan mala idea porque ellos no querían enfrentamientos con otros cárteles y que hay rumores que se está metiendo el Cártel Jalisco y que no quieren eso. Y la última llamada que recibí es de un abogado de Sonora que representa a uno de los cárteles y que ellos estaban interesados en acudir y hacer una propuesta”, expuso.
Al pacto de paz propuesto se han sumado 16 colectivos de búsqueda de personas desaparecidas del país, mientras que otros tantos no están de acuerdo. Y es que se tiene registro de que al menos 7 personas, en su mayoría madres buscadoras, han sido asesinadas en la búsqueda de sus desaparecidos.